Culebra de Cogulla (Macroprotodon brevis)

Identificación

Es el ofidio de menor tamaño de la península ibérica que raramente supera los 45 cm de longitud. Con una cabeza de forma aplastada bien diferenciada del cuerpo, con un hocico corto y casi recto. La coloración de fondo es variable predominando los tonos grises. La cabeza aparece adornada con 3 dibujos de color negro intenso que la coronan a modo de “V”. Lo que realmente nos va a permitir distinguir a esta especie es la cogulla, que le da nombre. Se trata de un collar situado en la parte posterior de la cabeza que tiene forma de capucha y que raras veces llega a rodear toda la sección del cuerpo. La naturaleza ha moldeado su anatomía de tal forma que la ha convertido en una especialista de la actividad subterránea y bajo las piedras.

Biología

Especie de costumbres crepuscular permaneciendo durante el día refugiada bajo piedras y en galerías que ella misma excava o fruto del trabajo de otros animales. Posee un periodo de reposo en invierno, aunque en zonas bajas del sureste está activa todo el año.

Dieta basada en otros reptiles de pequeño tamaño (lagartijas, eslizones,…). Cuando tienen una presa cerca se abalanza sobre ella inoculándoles veneno que atonta a la presa, enrollándose a continuación sobre ella y comienza a tragarse la presa. En comparación con su tamaño, la cogulla se alimenta de presas relativamente grandes, que unido a sus bajos requerimiento energéticos, le permite alimentarse en largos periodos de tiempo.

Distribución

Su distribución en la península ibérica es claramente meridional, con un mayor número de avistamientos en el cuadrante suroccidental. No es muy exigente en cuanto a la vegetación de su hábitat, ocupando dehesas, tierras de cultivos,… Prefiere ambientes algo húmedos con suelos blandos que sean fáciles de excavar. Selecciona a su vez lugares con abundantes refugios, como pedregales, paredes de mampostería,…

Conservación

Es una especie totalmente inofensiva para el ser humano, sólo se mostrará agresiva bufando y simulando ataques si se viese acorralada imitando el comportamiento de las víboras.

Está catalogada en la categoría de especie “Casi amenazada” a causa de los cambios en su medio natural, incendios, repoblaciones masivas con coníferas,… Una de las amenazas más graves a las que se enfrenta es la exagerada proliferación del jabalí, el cual ha pasado a convertirse en su principal depredador.

 César Muñoz Costa.

Esta entrada fue publicada en ANFIBIOS Y REPTILES DE EXTREMADURA. Guarda el enlace permanente.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *